viernes, 25 de diciembre de 2015

DESCANSO NAVIDEÑO








 

volvemos EL 15 DE ENERO
 
 
 
 
 
 

FELIZ AÑO NUEVO 2016
 

 






miércoles, 23 de diciembre de 2015

FELICES FIESTAS





 
 
 
y un muy próspero Año Nuevo 2016
que os colme de salud y felicidad
os desean de todo corazón
 
Manuel y Margarita
 
 
 
 
 
 

martes, 22 de diciembre de 2015

Las elecciones comentadas en la Prensa




Hoy no vamos a ser nosotros quienes comentemos el complicado panorama político tras las elecciones generales de ayer. ¿Y quién mejor que Iñaki Gabilondo (Cadena SER) y Teodoro León Gross (Diario SUR) para analizar con agudeza la jornada electoral del 20-D? Ambos maestros han publicado hoy sus artículos de opinión en la edición matinal de los medios ya citados, para los que colaboran habitualmente, y que nosotros nos permitimos reproducir seguidamente.
 
 
"Empieza un tiempo nuevo (Iñaki Gabilondo)
Se inicia un tiempo nuevo. Despedimos el modelo presidencialista -que no era oficial, pero era real- y pasamos al parlamentario -que era el oficial pero que no era real. Hasta ahora tocábamos el piano político con un dedo o con dos y ahora vamos a necesitar diez. Y para que no tardemos ni un minuto en comprenderlo, aquí está el gran galimatías inicial: no es aritmética elemental, son matemáticas superiores. ¿Quién gobernará? Aún no puede saberse. Nadie suma 176, ni siquiera con la ayuda de otra segunda formación.

Rajoy debe estar comprendiendo ahora que no gobierna necesariamente el cabeza de la lista más votada, lo que no ha parado de proclamar, si no el que puede hacerlo. Y pudiera darse el caso de que no fuera él. Y de serlo, en situación de precariedad máxima. De ahí que muchos hablen de legislatura corta o incluso de legislatura non nata que obligue a unas nuevas elecciones.

Se ha dado la gran paradoja de que asistimos a la muerte y a la sublimación del bipartidismo al mismo tiempo. Se despide el bipartidismo de la forma más extravagante, dejando una única salida matemática, la única alianza que suma 176: la gran coalición. Pero, ¿es posible? Doy por supuesto que a estas horas hay ya una avalancha de presiones para que se produzca. Todas las instituciones europeas: Consejo, Comisión, Banco Central, poderes financieros, mercados y similares... Sin embargo, lo posible puede ser imposible o al menos dificilísimo. Creo que el PSOE se rompería.
En resumen, victoria indiscutible pero muy amarga del PP, el peor resultado desde 1989 y sin aliados suficientes para sumar. Y derrota dulce del PSOE que con el peor resultado de su historia sueña con gobernar.

Podemos obtiene un gran éxito. Especialmente meritorio es su renacer cuando daba la sensación de que había empezado a declinar. Su victoria en Cataluña tiene un valor muy especial y se confirma que en Ada Colau asoma una lideresa de mucha importancia.

Ciudadanos creció cuando fue visto como una alternativa al PP. Y menguó cuando fue percibido como su marca blanca. Tendrá que estudiar qué hizo para parecer lo primero y por qué dejó de parecerlo y a tal velocidad durante la campaña.

Ya estamos en este nuevo tiempo que se nos va a hacer muy cuesta arriba a todos -políticos, periodistas y público en general- porque tenemos que aprender un arte que habitualmente nos cuesta mucho. En España, pacto siempre ha sonado a pasteleo, y cesión a traición. Pues en eso estamos.
 
Si lo desean, pueden escuchar el comentario hablado de Gabilondo siguiendo el enlace
 
Fuente: Cadena SER

 
 
"Notas de la noche electoral (Teodoro León Gross)

El bipartidismo ha muerto. Las 'dos españas' son tres o cuatro. El estreno del multipartidismo va a tener una gobernabilidad de aritmética alambicada. Sí, es exagerado lo de 'Segunda Transición', pero el paisaje ya no es de la I.ª Transición.

2.-Las cuentas ya se hacen más con PSOE y P's que PP y C's... ¿Y PP y PSOE, o éste con C's absteniéndose el PP? El multipartidismo apenas ha comenzado. No es un país ingobernable, sino un país que hay que aprender a gobernar.

3.-La nueva política está llena de paradojas: El PP ha ganado las elecciones con un fracaso ya legendario: de 186 a 122.

4.-La ausencia de mayoría absoluta no es novedad. Ha sucedido en seis de once comicios, a Suárez, Felipe, Aznar y Zapatero. Eran tiempos de 'dulces derrotas' y 'amargas victorias'. Pero 122 no sólo es la menor mayoría, sino quizá una minoría para la oposición.

5.-El PSOE derrota a las encuestas, aunque empequeñecido. Es el peor resultado del primer partido de oposición, bajo los 105 de Fraga en 1986. Otra paradoja: el derrotado Pdr Snchz puede ser el ganador en la carrera de la presidencia.

6.-Podemos, tercera fuerza, festejó la noche más que nadie. Más que derrotar a las encuestas, se convierten en actores protagonistas.

7.-El PP, desde su consolidación en 1996, nunca se había alejado de 10 millones, con una estabilidad mítica. Ayer 7 millones, como el PSOE del gran fracaso. Ciudadanos suma 3,3.

8.-El eje vieja/nueva política no debe medirse en escaños, sino en votos. A Ciudadanos cada escaño le cuesta el doble que al PP. La Ley Electoral está muerta.

9.-PP+PSOE: 12 millones de votos. La ley electoral, diseñada en 1978 para favorecer la estabilidad, preveía el dominio del bipartidismo, en las dos últimas décadas con una referencia de 20 millones de votos. Kaputt.

10.-El gran cambio de 1982, tuvo la movilización masiva del 79,9%. Se especulaba con record de participación, pero quedó muy lejos: 73,2%.

11.-La victoria del PP supera en votos al Suárez de 1979 pero ya es de lejos la victoria con menos porcentaje. Hasta ahora, Suárez en 1977, 34,4%; ayer, 28,7%.

12.-La estrategia del miedo no ha funcionado, salvo contra C's. El voto de castigo ha sido contra la deslealtad de las mentiras electorales, la corrupción y la desigualdad. Y eso no se corrige en casa de Bertín.

13.-Campaña más de líderes que de marcas. Notas en el CIS: 1º Rivera: 4,9; 2º Snchz, 4,5; 3º Pablo Iglesias, 3,8; 4º Rajoy: 3,3. Quedó último el 1º. Ganó el último.

14.-Pero Sr. Rajoy, ¿se puede triunfar con una valoración sistemática de 3 sobre 10 y la desconfianza constante de ocho de cada diez ciudadanos?

15.-El PP retrocede en Andalucía, aunque salva Málaga, eso sí, con dos diputados menos. El PSOE sigue a la baja.

16.-Bélgica, sin cerrar la gobernabilidad, tuvo meses de tranquila prosperidad. A saber. Pero esto pinta a un mandato corto e inestable.
 
Fuente: Diario SUR (“El Mirador”)
 
 

REVISTA DE PRENSA



Una vez más, EL PERIÓDICO, de la mano de Xavier Campreciós, ha hecho una excelente selección de los más relevantes comentarios de la prensa de hoy que, como era de esperar, se centran en el monotema de las elecciones generales y que pueden leer a continuación:
 
"El quiosco coincide en que las urnas dejan el gobierno de España en el aire
El veredicto es unánime: hasta 'La Razón' y 'Abc' ven complicado que Rajoy pueda seguir de inquilino en la Moncloa
La victoria de En comú podem y del derecho a decidir da pie a interpretaciones editoriales distintas sobre como afectará a Catalunya

La prensa de Madrid y Barcelona coincide en interpretar que el 20D deja en el aire el Gobierno de España. Eso es lo que señalan con pesadumbre o con alegría las portadas del quiosco hoy. Por la corta victoria de Rajoy, que en todo caso ha explicitado ya su voluntad de intentar formar un gobierno estable. Y por la fragmentación de unas Cortes Generales en dos bloques parejos de derechas (PP + C's) y de izquierdas (PSOE + Podemos + IU) en los que los nacionalistas periféricos (ERC + DLl + PNV) pueden ejercer de árbitros, siempre que el problema catalán no sea un escollo insalvable.

O sea, que salvo la una hipotética gran coalición a la alemana (PP + PSOE) que solo el establishment y la derecha de la 'marca España' desean no hay mayoría absoluta aperentemente posible en un reino poco dado políticamente al diálogo, la negociación, el pacto y la coalición. Todo eso está ya en en el quiosco de hoy.

En Barcelona se titula con la idea de que España se enreda en el lío y la fragmentación ('Ara', 'El Punt Avui' y EL PERIODICO) y en la concreción de ello, la dificultad de formar un gobierno estable ('La Vanguardia'). Y las cuatro portadas se calzan con el éxito de la opción de En Comú Podem de Ada Colau y Pablo Iglesias, así como en la consolidación del derecho a decidir que abanderan, que ha relegado a los independentistas de ERC y DLl, que lo minimizan, y a quienes lo rechazan, PSC, C's y PP.

ARA Y EL PUNT AVUI
Esas dos ideas asoman en los cuatro editoriales. El de 'Ara' se titula "El efecto Podemos trascoca España y refuerza Catalunya. Los resultados del 20D complican mucho la gobernabilidad del Estado y avalan el derecho a decidir". El de 'El Punt Avui', titulado "Catalunya en el lío español", va mucho más allá al sostener que hay ahora más diputados independentistas que nunca Madrid --la suma sale contando a los de CiU del 2011 como autonomistas-- y concluir: "Hay pocas opciones de cambio real que no impliquen abrir la puerta al reconocimiento activo del derecho de autodeterminación de Catalunya. El 'procés' no solo aguanta, sino que amplía opciones".

LA VANGUARDIA
El editorial de 'La Vanguardia' se titula "La hora de los pactos. Hacia una nueva cultura política" y aboga porque se instaure de una vez en España. Aunque su conclusión sobre Catalunya está en las antípodas de la de 'El Punt Avui': "El error de la resolución del Parlament de desobediencia al Estado y la agotadora y opaca negociación con la CUP para la investidura han pasado factura a la formación de Artur Mas, que elección tras elección ve cómo el electorado castiga su alejamiento de la centralidad. Que el independentismo haya sumado sólo 17 escaños de 47 posibles, sumado a la victoria de En Comú Podem, que se basa en la convocatoria de un referéndum y en una reforma constitucional que mejore el encaje de Catalunya en España, demuestra que la tercera vía que ha defendido siempre este diario no sólo no es una quimera, sino la única salida posible. Aunque no sea a corto plazo".

EL PERIODICO
El de EL PERIÓDICO destaca estas ideas en los titulares: "España cambia de piel política. El triunfo del PP puede ser estéril si fragua una mayoría progresista muy compleja pero aritméticamente posible. El soberanismo pierde 17 puntos respecto del 27-S pero ERC se beneficia de una gran retroceso de CDC".

LA RAZÓN
En la capital del reino, hasta el diario más marianista ve peliagudo el trance de Rajoy. 'La Razón' titula en portada que "Rajoy gana las elecciones con un Parlamento ingobernable". El titular interior reza: "Rajoy, frente a la pinza anti-PP". Y el editorial se titula: "Por sentido de Estado debe gobernar la lista más votada". Una cantinela esta, por cierto, que ignora la ley que tanto invoca el PP, la Constitución, lo que es óbice para que el último titulín de primera página del diario recuerde que si no hay presidente dos meses después de la primera votación de investidura se convocarían elecciones.

ABC
No lo ve más claro el otro diario muy afín al PP, aunque no tanto a Rajoy. 'Abc' ve en el aire el Gobierno en portada y dentro. Y lo completa con una segunda idea: "PP y Ciudadanos superan en cuatro escaños la suma de PSOE y Podemos". El editorial se titula "Escenario complicado para España". Y el director, Bieito Rubido, sostiene que solo hay un dilema ahora: "Necesitamos estabilidad política. Nos enfrentamos de nuevo a la disyuntiva de escoger una gran coalición a la alemana o un pacto de perdedores a la portuguesa".

EL MUNDO
'El Mundo' interpreta que el entierro del bipartidismo deja en el aire el gobierno. Y esa información va acompañada del un editorial titulado "Una victoria insuficiente, un país difícil de gobernar". Y de un análisis de Victoria Prego titulado "Sin ganador claro y sin estabilidad. El mensaje lanzado al PP ha sido nítido: no importa lo que usted haya conseguido, no queremos que nos gobierne".
 

EL PAÍS
'El País', finalmente, interpreta en positivo el final del bipartidismo. "La pérdida de la mayoría del PP --que gana sin votos para gobernar-- abre espacios a los pactos". Con esas ideas en los titulares principales, el editorial ("Cambio y estabilidad. España necesita ser gobernada tras pasar la página del bipartidismo") es un canto a la cultura del pacto. Así acaba: "Después de cuatro años en los que el diálogo político ha brillado por su ausencia, los partidos tienen que retomar la vía de la negociación para acometer los problemas que tiene nuestro país. Esta es la mejor manera". Además, Xavier  Vixdal-Folch recuerda que la coalición es la regla de gobierno en Europa: de los Veintiocho estados de la UE, 22 tienen gobiernos de dos o más partidos.
 
TITULARES DE PORTADA
El País
"La pérdida de la mayoría del PP abre espacio a los pactos". "La gobernabilidad del país depende de posibles acuerdos". "Los dos grandes partidos apenas superan el 50%". "Ada Colau refuerza su liderazgo con una clara victoria".
El Mundo
"España tumba el bipartidismo y deja en el aire el gobierno". "Iglesias: 'Lo que se ha votado es un cambio de sistema"

ABC
"España deja en el aire su gobierno".
La Razón
"Rajoy gana las elecciones con un Parlamento ingobernable".
Ara
"Espanya, fragmentada". "Catalunya, dret a decidir".
El Punt Avui
"Embolic a Espanya, aire per a Catalunya". "Iglesias reitera l’aposta per fer el referèndum". "El sobiranisme català, més fort que mai a Madrid".
La Vanguardia
"Gobierno en el aire". "En Comú Podem, con el impulso de Colau, arrasa en Catalunya"; "El Barça agiganta su leyenda con un nuevo Mundial (0-3)".EL PERIÓDICO
"Lío general". "En Comú Podem se impone en Catalunya al soberanismo"; "El Barça se corona como mejor club del planeta".
 
Fuente: El Periódico
Autor: Xavier Campreciós
 
 
 

PENSAMIENTO





Ese afán que tienen los políticos la noche de las elecciones
por querer presentarse al público como ganadores,
cuando, en realidad, los resultados dicen todo lo contrario,
es francamente patético.
 
M.R.
 
 

viernes, 18 de diciembre de 2015

Atalaya: Cuidemos nuestra lengua





El conocido filólogo español, Ramón Menéndez Pidal, opina en uno de sus numerosos libros sobre la lengua española, que entre otros factores el castellano nació del mal uso del latín vulgar (que hablaban los legionarios romanos) que hacían los habitantes de la Península Ibérica, que, al parecer –digo yo- eran duros de oído y pronunciaban mal los vocablos latinos. Todavía hoy se da este caso con el nombre de una compañía de seguro de enfermedad: “Sanitas” (Salud). La gente dice “Sanítas”, en vez de Sánitas que sería lo correcto. El error está ya tan extendido y aceptado que la propia compañía se anuncia como “Sanítas.

La Real Academia Española es la institución ha de velar por un español correcto y homogéneo. No es tarea fácil si se tiene en cuenta que según cálculos del Instituto Cervantes, el español, con diversos matices, es hablado por unos 559 millones de personas (incluidos los hablantes de dominio nativo), sobre todo en Hispanoamérica, donde también proliferan multitud de Academias de la Lengua, con la pretensión de que la Real Academia Española acepte e incluya en sus diccionarios términos que sólo son propios de un determinado país latinoamericano.
 
Entretanto ya nos hemos acostumbrado a que en Argentina y Cuba los españoles seamos los gallegos. También en los medios de comunicación radio y televisión españolas se tiene en cuenta que el verbo “coger” es en  Argentina una palabra soez (significa “joder”) y se sustituye este verbo tan latino por otros como “tomar", “pillar”, “asir”, “aprehender”, “agarrar”… Existe un chiste muy famoso en Argentina. Un español pregunta a un hombre en la calle que dónde se puede coger a un taxi, a lo cual contesta el argentino: “como no sea por el tubo de escape...”. Sin embargo en otras naciones sudamericanas, “joder” no tiene ninguna connotación sexual. Significa sencillamente “fastidiar”, como dice la canción: “Joder qué catarro que me está jodiendo..”
 
Las Conchas y Conchitas lo tienen crudo en Chile, donde esa palabra significa el órgano sexual femenino. Para un chileno, La Concha de San Sebastián debe de ser una prostituta muy popular en aquella ciudad vasca. Por otra parte, los iberoamericanos deben tener cuidado cuando vengan a España, que no les ocurra lo que le pasó a una informática portorriqueña, invitada por su jefe a una fiesta. Cuando el director la presentó a su esposa, la portorriqueña quiso agradar a su director y dijo: “¡Pero qué pava es su esposa!”. Al matrimonio le sentó muy mal el piropo. En Puerto Rico “pava” significa guapa, elegante. Al revés, no alabemos a nadie en Colombia llamándole “guapo”: la palabra significa allí “feo”.

Pasemos al español, que es el tema que he elegido esta vez para Atalaya. Si Menéndez Pidal viviera y  escuchara cómo se habla ahora en España, seguro que le embargaría una filológica cólera y que se preguntaría para qué sirve la Real Academia Española, que no sólo tolera los disparates lingüísticos, sino que en ocasiones los avala y, en otras, los silencia. Tomemos como ejemplo el verbo “adecuar”. Siempre habíamos dicho “adécua” (acento sólo fonético). Ahora se dice oficialmente “adecúa” y lo mismo ocurre con el verbo “evacuar”.

Una importación sudamericana en los años 90 fue el llamado dequeísmo, construir con la preposición “de” expresiones como “opinar, pensar, creer…de que…”. Otra tontería es la expresión, que parece querer abrirse paso, “ambos dos”. Se trata de una redundancia ya que “ambos” significa “los dos”.
 
La Real Academia Española permite que se vaya suprimiendo el pronombre (posesivo) “cuyo”, empleando en su lugar complicadas construcciones: “El padre, el hijo del cual se hizo cargo de la empresa…” ¿No es más fácil decir: “El padre, cuyo hijo?” Siempre pego un respingo cuando oigo frases como: “Los bomberos llegaron en el punto álgido del fuego”. Álgido siempre había sido un término médico, que significaba el punto más bajo de la temperatura. Para mí es un misterio cómo “álgido” de significar lo más frío, ha pasado a ser “lo más caliente”, “la cumbre”.

Si echamos un vistazo a la gramática también tenemos motivos para preocuparnos. El pretérito imperfecto expresa una acción en el pasado que  no ha concluido. “El automóvil circulaba en la dirección contraria”. Se usa principalmente cuando una acción que sucedía es interrumpida por otra acción: “El automóvil circulaba en la dirección contraria, cuando fue sorprendido por la Guardia Civil de Tráfico”. En obras literarias puede usarse también estilísticamente: “No la conocía. Había cambiado tanto…”. Lo incorrecto es el uso constante del pretérito imperfecto en vez del indefinido: “La policía detenía a dos sospechosos…”. Falso. Correcto en este caso es: “La policía detuvo a dos sospechosos”.

El condicional expresa una acción dependiente de que ocurra otra acción o se presente una situación distinta. “Iría a Noruega si no hiciese tanto frío allí”. En los medios se ha introducido el condicional cuando algo es una suposición: “X habría malversado 40 millones de euros”.

Ya me he cansado de luchar por el “la” como complemento directo (acusativo), que no debe confundirse con el “le”. .Si digo: “Le vio” no sé si vio a un hombre o a una mujer. Si es una mujer es preciso decir: “La vio”. Cuando es un complemento indirecto (dativo), el “le” vale para los dos sexos. Este error gramatical podemos encontrarlo en los medios, sobre todo en la televisión, pero también en las películas españolas y en los doblajes.
 
¿Qué hace la Real Academia Española contra estos atentados contra la pureza de nuestra lengua? O los bendice o se hace el longuis. También podemos decir que gran parte de los errores del castellano vienen ya de la escuela. No todos los profesores hablan y escriben un buen castellano, y contagian a sus alumnos. Pero las auténticas raíces del mal están en los planes de educación. Me duele decirlo, pero con el régimen franquista era mejor la calidad de la enseñanza, si suprimimos la propaganda fascista de libros de texto como la Historia o las llamadas “Tres Marías”, exceptuando el dibujo.
 
Es un gran error suprimir los fundamentos de las lenguas clásicas (latín, griego), que tan útiles son para aprender la propia lengua y lenguas extranjeras como el francés, el inglés y el alemán. En cambio, yo suprimiría la Religión, sustituyéndola por “Historia de las Religiones”. Materias también muy útiles son la Filosofía y la Ética. El señor Wert se lució con su plan de Educación. ¿Pero qué se puede esperar de un personaje tan sumiso al señor Rajoy y a la iglesia católica española?
 
 
 

 

Pincelada: La cultura del insulto





Quién más, quién menos habrá oído alguna vez hablar de la proverbial enemistad que desunía a dos de los más grandes maestros de las letras españolas, los poetas Francisco Gómez de Quevedo y Luís de Góngora, que dedicaban parte de su tiempo a lanzarse mutuamente dardos envenenados en forma de  ocurrentes improperios. Todavía tengo grabado en la memoria el satírico soneto “A una nariz”. En él, el madrileño Quevedo, con muy mala uva, hacía malévola referencia al prominente apéndice nasal de su antagonista cordobés, Góngora.
 
Hace un par de semanas que un amigo de Facebook (no recuerdo bien si era el poeta Javier Lorenzo Candel o el letrado Antonio Manuel Núñez-Polo Abad, ambos prominentes albaceteños) compartía una página muy graciosa sobre los ingeniosos insultos que se utilizaban en el Siglo de Oro. Desgraciadamente, la borré por error poco después de leerla y ahora no la encuentro por ninguna parte.
 
Como me quedé con las ganas de saber más sobre el tema, recurrí a internet donde encontré numerosos artículos sobre el arte de insultar. Uno de ellos, es de Beatriz Serrano Molina para la publicación digital Buzzfeed (buzzfeed.com) y lleva el sugerente título “Insulte con propiedad con estas 14 palabras antiguas” y el subtítulo: “Insulte como Quevedo y déjese de menudencias”. El otro, sacado de la revista digital GQ: “221 insultos en castellano que deberías saber”. Si les apetece, pueden leerlos siguiendo los enlaces. Seguro que disfrutarán. Además, el primero de ellos va acompañado de bonitas ilustraciones.
 
Pero de repente, ¡taratachinnnnnnn chinnnn chinnn!, caí en la cuenta de que hace un montón de tiempo habíamos comprado un libro que debía estar dormitando en algún rincón remoto de nuestra biblioteca. Y ya conocen el dicho: “quien busca encuentra”. Finalmente, di con él en una de las estanterías dedicadas a la lingüística. Se trata de “El gran libro de los insultos” de Pancracio Celdrán Gomáriz.
 
En esta obra, bastante diferente a las demás, el autor no sólo se ha dedicado a recopilar más de 10.000 palabrotas para todas las ocasiones y situaciones que forman o formaron parte del vocabulario de España  e Hispanoamérica, la mayoría de ellas desconocidas para el común de los mortales, entre los que yo me cuento. ¿O les dicen algo los términos "culichichi" o  "culuchiche" (un correveidile rastrero, adulador y lamec….) o “dondorondón" (personaje irreal fastuoso y a la vez ridículo)? En las 1056 páginas del volumen,  Celdrán Gomariz explica también su significado, su historia y su recorrido semántico. Además, el prologuista del libro es nada más y nada menos que Antonio Fraguas, "Forges". Y, por si eso fuera poco, pueden también encontrarlo en versión PDF en internet.
 
Por cierto, Pancracio Celdrán Gomariz acaba de publicar una nueva obra que viene como anillo al dedo a la campaña electoral que estamos viviendo. Su título: "Manual de insultos para políticos". En 458 páginas el autor explica el significado de palabras como: “uñilargo” o “cogecosas” (político del siglo XIX que, cuando dejaba su escaño, arramblaba con todo lo que podía llevarse: lápices, gomas de borrar, etc.) o, ya más moderno, “izmierdoso” (político de la izquierda radical).
 
Así que, si se cruzan por el camino con algún político que les caiga particularmente mal en pleno speech, en lugar de liarse a bofetadas con el policastro, suéltenle un rotundo “urdemalas” (individuo tendente de manera natural hacia la conspiración y la intriga), mucho más elegante y menos violento que la chufa que le pegaron ayer a Mariano Rajoy.
Margarita Rey
 

LEIDO EN LA PRENSA



Esta mañana me he reído mucho al leer el artículo "¡Aquí se insulta!" que Teodoro León Gross  publica hoy en su habitual columna de Diario SUR, "El Mirador" y que, además, tiene mucha miga. Dice así:
 
"Bobo solemne», «acomplejado», «traidor», «inestable», «mentiroso» «inconsecuente», «manipulador», «sectario», «irresponsable», «grotesco», «hooligan», «frívolo», «cabeza de adorno», «zafio», y por supuesto «indecente»… Todo lo que hay dentro de esas comillas son cosas que le han dicho al presidente del Gobierno, eso sí, no a éste sino a su antecesor. Zapatero tuvo que oír todo eso y mucho más, «indigno», «veleidoso», «cobarde» «débil», «chisgarabís», «perdedor» «insensato», y suma y sigue hasta «Mr. Bean». Todo procede de dirigentes del PP; esos mismos líderes ahora escandalizados ante el exabrupto de Snchz ante el que exclaman ¡aquí se insulta! con la hipocresía con que el capitán Renault decía ¡aquí se juega! en el casino de Ricks en Casablanca del que cobraba mordidas.

Vale, seguramente se trata de una pataleta calculada tras la derrota en el debate, donde Sánchez no construyó un discurso gubernamental pero sí se aplicó en desmantelar el planteamiento de Rajoy hasta dejarlo medio noqueado. Con todo, resulta raro que toda la tropa del PP saliera a proclamar a los cuatro vientos la necesidad de respetar las buenas formas, y hacerlo llamándole «chulo de barrio», «payaso» o «macarra», además, claro, de «ruin», «miserable» y «mezquino». Algo no encaja.

«No somos de insultar ni dividir» presumía Rajoy, jefe de Pujalte o Villalobos, en el fragor de la polémica. Sí, el mismo Rajoy capaz de llamar al presidente anterior «bobo solemne» o «cobarde sin límites» y no en el choque caliente de un debate electoral sino en el Congreso. Esta polémica resulta demasiado hipócrita como para tener credibilidad. Muchos ciudadanos que no comparten el matonismo verbal del debate tosco, aún estarán perplejos al comprobar que en la campaña apenas se ha debatido sobre la indecencia de los papeles de Bárcenas, o Gürtel, o Púnica, o los sms … pero sí se debate sobre llamar indecente al responsable de esas indecencias. Parece de locos.

Indecencias, claro, hay de norte a sur, de los Ere a Pujol; y el fariseísmo, como la corrupción, no tiene siglas. Todo esto en definitiva es otro capítulo del ‘y tú más’. Cuando Zapatero era insultado, nadie salió a defender las buenas formas, al revés; por demás el PSOE ya tenía poca autoridad desde los días ásperos del ‘No a la guerra’ cuando se llegaba a tildar incluso de ‘criminales’ a dirigentes del PP. Y ya es una ironía que Pablo Iglesias; el mismo que ha llegado a protagonizar personalmente escraches a Rosa Díez, dé ahora lecciones de educación. Se puede hacer ironía mordaz e inteligente, pero aquí manda el sectarismo zafio por una razón obvia: el electorado aplaude los insultos, eso sí, siempre que sean contra el rival.

Nota bene.- Ayer la clase política reaccionó como hay que reaccionar tras la agresión al presidente. Sí se puede. Sencillamente no se suele querer".
 
Fuente: DIARIO SUR (El Mirador)
Autor: Teodoro León Gross
 
(Gross es Licenciado en Filología Hispánica, doctor en Periodismo, ensayista y columnista del Grupo Vocento y, en particular, de Diario Sur.  Es profesor de Comunicación en la Universidad de Málaga y director de la Cátedra Manuel Alcántara, cuya Fundación preside).
 

 

PENSAMIENTO


 
 


“Cuanto más se añora el pasado, más corto se hace el presente”.


M.M.



 

domingo, 13 de diciembre de 2015

Atalaya: Todo por la patria



El pasado viernes, poco antes de las seis de la tarde, se produjo un ataque de los terroristas talibanes afganos contra la embajada española en Kabul y un edificio que servía de alojamiento para huéspedes importantes. Dos policías muertos y varios heridos fue el triste balance del atentado suicida.
 
Al principio, las noticias dadas a conocer por el ministro de Asuntos Exteriores fueron confusas o tiraban a la baja, pareciendo que el atentado contra  la legación española había sido una casualidad. .El talibán suicida estrelló un coche con explosivos contra el edificio de los visitantes anexo a la embajada. Testigos presenciales, periodistas y agentes de seguridad americanos y afganos declararon que el atentado fue un ataque frontal contra la embajada española, cuyo interior conocían bastante bien los talibanes, que llegaron a penetrar en él y subieron al tejado del edificio desde donde dispararon a los policías, algunos de los cuales pudieron refugiarse en el búnker. “Lo que hemos vivido aquí es culpa de mucha gente”, dijo uno de los supervivientes. “La embajada estaba aislada en una de las peores zonas de la ciudad y sin ninguna seguridad”.
 
La Unión General de Policía denunció el sábado la seguridad defectuosa de la legación española. “La cercanía entre las casas y la calle es tal que algunas de sus terrazas tocan casi con el muro exterior del recinto, sin ningún tipo de seguridad”. Esto hace que incluso con un cocktail molotov se pudiese llevar a cabo un ataque.

El embajador español, Emilio Pérez de Águeda, reside en la llamada zona verde, el perímetro protegido junto a la Embajada de Estados Unidos en Kabul. El sindicato policial señala que los diplomáticos y demás personal de la embajada vivían con el temor de un atentado, dada la escasa distancia  que separa al edificio de la calle. La seguridad externa estaba confiada a 10 policías afganos.

A pesar de estas deficiencias el gobierno español nunca se planteó trasladar la Embajada a otro lugar más seguro. Más protegidos están ahora los dos muertos y varios heridos, trasladados a Kaia North, sede de la delegación de la OTAN. Que no perecieran más personas, la mayoría españolas, se debe a la aparición de policías y soldados norteamericanos, que pusieron fin a la pesadilla.

Mariano Rajoy, que aspira por continuar con sus chapuzas desde La Moncloa o desde la sede de su partido, PP, en la calle Génova, dio otra versión distinta de los hechos. Después de su ministro de Exteriores José Manuel García Margallo, Rajoy dijo en Orihuela (Alicante) antes de comenzar un mitín electoral: “El ataque no iba contra nosotros. No ha habido un ataque. No ha habido ni era un ataque contra la embajada de España en Afganistán y así lo han reivindicado los talibanes. Era un ataque contra algunas casas de huéspedes, que estaban muy próximas a la embajada. Todos podemos ser objetivo de un ataque terrorista, cualquiera, cualquier país occidental, pero en este caso no lo era contra  la embajada de España”.

¿Quién dijo que el tema terrorismo quedase fuera de la campaña electoral? Rajoy es un ejemplo del político que ha arrojado la ética al  retrete. Sus palabras son un insulto para los militares españoles que luchan denodadamente contra los extremistas y terroristas musulmanes y que se sienten llamados por su patria, España, a dejar muy alto el honor de cumplir con un duro deber, de dar la libertad a los países del Medio y Lejano Oriente, que ahora en el torbellino asesino de los fanáticos islámicos, son forzados a vivir por debajo de la dignidad humana. “Todo por la patria”, pues el ímpetu de aquellos enajenados también amenaza a Occidente, y en primer lugar a España, “Al Andalus”, que durante 8 siglos estuvo ocupada por el Islam.

El “todo por la patria” también obliga a Rajoy a decir la verdad no sólo por respeto a los ciudadanos españoles, sino también a las sacrificadas Fuerzas Armadas y a los diplomáticos que representan a España en los lugares más peligrosos con una deficiente protección, como Kabul.
 
 
 



Pincelada: La Voz de ojos azules




Ayer sábado Frank Sinatra hubiese cumplido 100 años. Sus canciones arrullaron mi cuna. A mi madre, muy aficionada a la música americana (era una fan incondicional de Ginger Rogers y Fred Astaire) y a la zarzuela, no le gustaban “las españoladas” –a excepción de doña Concha Piquer, claro–. Casi siempre tenía la gramola en marcha (el “picú” llegaría más tarde): Carlos Gardel, Bing Crosby, “Frankie Boy” y los “big bands” americanos (Benny Goodmann, Glenn Miller) me susurraron al oído desde mi más tierna infancia. Así, con esa música como telón de fondo, desde muy pequeñita me fui enamorando poco a poco del Frank Sinatra cantante y, algunos años después, también de él como actor.

Aunque su mala fama de macarra, borrachín y pendenciero era notoria, yo debía haber vivido hasta entonces en una burbuja, ya que no me enteré de ella hasta mediados de los sesenta por un reportaje que vi en la televisión británica durante mi estancia en Inglaterra.  Y la verdad es que el gachó era un verdadero cromo…
 
Mal estudiante, el italoamericano Francis Albert Sinatra fue de jovencito pandillero y seguro que hubiera caído en la delincuencia de no haberse presentado en 1935 a un concurso radiofónico que, por supuesto, ganó. Su acariciante voz (y, probablemente,  la ayuda de algún capo mafioso) le hizo escalar en menos de 10 años los más altos peldaños de la fama, convirtiéndose en un auténtico fenómeno de masas.
 
Mujeriego empedernido (aparte de sus cuatro matrimonios oficiales, tuvo amoríos con Lana Turner, Judy Garland, Kim Novak, Marilyn Monroe, Lauren Bacall y, supuestamente también con Grace Kelly y Jackie Kennedy, sin contar a las innumerables “no-names” que pasaron por su cama), “La Voz” (uno de sus apodos), después de sufrir un bajón en su carrera, se reinventó como actor dramático, llegando incluso a ganar un Óscar como mejor actor de reparto por su magnífica interpretación del soldado Di Maggio en “De aquí a la eternidad”. Ríos de tinta hizo correr igualmente su operación de acoso y derribo a la por aquel entonces bellísima Carmen Sevilla. Corría el año 1956 y Frank Sinatra había venido a nuestro país a rodar “Orgullo y Pasión” con Sofía Loren. Después de conocer a “Carmen de España” en una fiesta, quiso llevársela al huerto. Pero Carmen, que era “cristiana y decente” como en la copla, le dio calabazas.
 
Pero su gran amor fue, sin duda alguna, Ava Gardner, su segunda esposa, apodada “el animal más bello del mundo”, con la que vivió un matrimonio tortuoso que le llevó por la calle de la amargura, en el que los celos –más de una vez fundados– estuvieron a la orden del día. Especialmente desde que Ava vino a España en 1950 para rodar en la Costa Brava “Pandora y el holandés errante” y descubrió su afición por los toreros. Primero, Mario Cabré, actor y trovador en sus ratos libres, uno de los protas del filme. Además de trajinársela, le dedicó varios poemas de amor que, por cursis, provocaron la hilaridad de Ava. Luego, el sonado romance con el macho alfa Luís Miguel Dominguín, que llenó las páginas de la escasa prensa rosa española de la época a pesar de la censura. Su pasión por Dominguín y su fascinación por España (que llevaría más tarde a la actriz a afincarse en Madrid) hicieron el resto. El matrimonio Sinatra-Gardner se rompió definitivamente.
 
Por si les interesa el tema, precisamente este verano se ha publicado un interesante libro sobre las experiencias españolas de Frank Sinatra titulado: “Sinatra: Nunca volveré a este maldito país”. En él, su autor, el periodista Francisco Reyero,  cuenta una serie de anécdotas inéditas sobre Ava y Frank y la mala relación de éste con la España de Franco, que culminaría con su expulsión del país. La obra, un buen trabajo de investigación que ha tenido muy buenas críticas, pone de manifiesto lo bien que se vivía en la alta sociedad de la dictadura, sus fiestorros e, incluso, orgías, que costaban una millonada (mientras el pueblo llano pasaba penurias) y la doble moral tan típica de aquella época del nacionalcatolicismo, puritana hacia afuera, pero de costumbres depravadas por dentro.
 
Sobre la ambivalente relación de Sinatra con John F. Kennedy, a quien proporcionó más de una chica fácil y con quien compartió amantes, se han escrito libros. Una de esas "amigas íntimas", la pobre Marilyn Monroe, pasaba al parecer de mano en mano como la falsa moneda. Y si por si aún no lo sabían, parte de la campaña electoral de J.F.K. fue financiada por el capo mafioso amigo de Sinatra, Sam Giancana. Un favor que Kennedy olvidó nada más llegar a la Casa Blanca cuando nombró Fiscal General a su hermano Robert Kennedy, con el único propósito de erradicar la lacra del crimen organizado. A partir de ahí, Sinatra cambió de bando y   se convirtió en enemigo personal de los Kennedy.  En 1968 dio su apoyo al Partido Republicano, gracias al cual Nixon (el del escándalo Watergate) ganó las elecciones.
 
Hasta poco antes del 14 de mayo de 1998, fecha de su fallecimiento, Frank Sinatra estuvo en la brecha. Fue una larga carrera, llena de luces y sombras, en la que recibió innumerables distinciones y homenajes. Todavía hoy, incluso los más jóvenes le conocen por sus inolvidables versiones de Strangers in the Night (una composición del alemán Bert Kaempfert) o My Way. Ayer, el rascacielos Empire State Building de Nueva York se iluminó por la noche de azul como homenaje póstumo a Frank Sinatra, también conocido como “old blue eyes” (el viejo de ojos azules), en el cien aniversario de su nacimiento.
 
Nuestra particular aportación en memoria de "La Voz", que queremos dedicar a todos nuestros lectores, es una de sus más emblemáticas melodías que se sigue escuchando en estas fiestas que se aproximan: el clásico White Christmas (Navidades Blancas) que pueden oír siguiendo el enlace.
 
Margarita Rey
 
 
 
 
 

LEIDO EN LA PRENSA



Joan Tàpia

Como apuntaba el pasado 9 de diciembre en mi artículo "El debate", parece ser que la consigna del PP, Ciudadanos y Podemos es ir a por Pedro Sánchez. El  PP, porque el PSOE es desde siempre el partido rival por antonomasia y Pedro Sánchez, el único que puede hacer sombra a Rajoy. Ciudadanos, para merendarse a su clientela de centro-derecha y, Podemos, porque quiere hacer desaparecer al Partido Socialista y colocarse en su lugar. Así que la táctica de los tres mosqueteros, Rajoy, Rivera e Iglesias contra Sánchez es la misma estrategia que utilizó Julio César para  deshacerse de sus adversarios y poder mantenerse (más o menos) tranquilamente en el poder: "divide et impera" ("divide y reina"), en otras palabras, sembrar cizaña para vencer al adversario y poder gobernar.
 
Joan Tàpia, en su comentario de hoy para El Periódico titulado ¿Hay pinza contra Pedro Sánchez?, también coincide conmigo. En su brillante análisis de la situación política, a una semana de las elecciones, el reconocido periodista opina:
 
"El PP quiere dividir el voto del 67% de españoles que el CIS certifica que quieren un cambio de Gobierno
Rajoy e Iglesias repiten con menor visibilidad la táctica de Aznar y Anguita contra Felipe González

Si, como dicen las encuestas, el PP gana el próximo domingo, ¿lo hará con claridad para que aquella noche ya sea un hecho que Mariano Rajoy seguirá en la Moncloa? ¿Puede Pedro Sánchez dar la sorpresa y ganar, o llegar segundo tan pegado al primero que todo sea posible? ¿Podría Albert Rivera ser investido presidente? ¿Es posible que Podemos supere al PSOE y, paradójicamente, favorecer así un Gobierno de derechas?

Son las cuatro preguntas clave. Y ninguna tiene respuesta segura porque estamos (salvo las de 1993) ante las elecciones más inciertas. Por primera vez, los partidos en liza no son dos, sino cuatro. Y hay nada menos que un insólito 41,7% indeciso.

El Gobierno filtra que tendrá un 30% de los votos y 140 diputados. En esa cota, Ciudadanos no podrá rechistar y Rajoy gobernará. Puede, pero el CIS le da solo el 28,6% y 120-128 diputados. Entonces todo se complica porque Ciudadanos tendría que votar a favor para que los 'noes' a la investidura (PSOE, Podemos y nacionalistas varios) no sumaran más que los 'síes'.

Suceden dos cosas. Una: la crisis económica más grave desde 1929 ha laminado la confianza en los partidos que la han tenido que gobernar. En la última encuesta del CIS, la labor del PP es juzgada mala o muy mala por el 55,9% y la del PSOE, por el 47,6%. Este amplio descontento ha dopado a los emergentes, Podemos y Ciudadanos, con dos líderes combativos que lo pueden prometer todo porque son vírgenes de poder. Dos: nada menos que el 67,1% de los encuestados por el CIS dicen querer un cambio de Gobierno. ¡Váyase señor Rajoy pese a la mejora de la economía!

Son datos que torturan al Gobierno. Llegarán primeros, como cree el 52,4% de los encuestados del CIS, pero la victoria puede ser pírrica. Y no es imposible la sorpresa. Al fin y al cabo, el PSOE, eterno contrincante, le gana por los pelos (18,9% a 18%) en la pregunta sobre el partido preferido para gobernar. Y en una escala de 0 a 5 (0 es el rechazo total y 5, el voto seguro), el PP se queda en un 2,61, por debajo del 2,96 de Ciudadanos y el 3,14 del PSOE, aunque ligeramente mejor que Podemos (2,47).

¿Cómo asegurar la victoria? Si hay un 67% de rechazo, lo primero es que el voto de protesta no se concentre, sino que se fragmente al máximo entre los tres rivales. Divide y vencerás. Y los debates de 'El País' y de Antena 3-La Sexta, a los que Rajoy no acudió (tenía más a perder que a ganar), iban bien. Expondrían a Pedro Sánchez al fuego cruzado de Rivera e Iglesias. Rajoy (con costes) podía no ir, pero el líder del PSOE estaba obligado a concurrir. Salvo que exteriorizara idéntico desprecio al debate que el PP del plasma. Los debates a tres le sentarían mal a Sánchez. ¡Dos vírgenes agresivas contra un pecador en momento de ansia puritana!
 
Todos somos subjetivos pero, peor o mejor, Sánchez salió vivo. Y en algunos puntos, como la imposibilidad de bajar impuestos sin hacer recortes, fue el más sensato. Aunque en lo de la reforma laboral (¿miedo a Podemos?) se limitó al tópico negativo.

Pero más decisivo que el debate es lo que propagan las redes sociales sobre quién lo ganó. Todos somos subjetivos y cuando no hay un claro vencedor, todavía más. Pero también ha habido pinza mediática contra el soldado Sánchez. La derecha no pudiendo dar ganador al ausente (ni a Soraya, que solo guardó la portería) ha pregonado que Sánchez se hundió y, con menor énfasis, que Pablo Iglesias ganó. Y la izquierda 'tutti-fruti' ha recuperado la fe en tomar el cielo por asalto.
 
Ahora al PP le conviene tanto dividir al máximo el voto de rechazo como que suba más Podemos, que roba al PSOE, que Ciudadanos que come en el electorado de derechas o centrista. ¡Cuánto más debilitado llegue Sánchez a la última semana de campaña y al debate del lunes, mejor para Rajoy, que sabe que es el candidato menos valorado!

El propio Rajoy, en un aparente arranque de sinceridad y ecuanimidad, lo confesó cuando el Día de la Constitución (tras la encuesta del CIS que le dejaba lejos de los deseados 140-145 diputados), al saludar a Pablo Iglesias, le dijo: "Vais muy bien en las encuestas, como nosotros". Y el 'ABC' del pasado jueves remachó el clavo al abrir su portada con un título espectacular que debió entusiasmar al público del barrio de Salamanca: 'Podemos revisa al alza sus expectativas por la debilidad del PSOE'. ¡El diario histórico de la derecha jaleando a la izquierda que criticaba por "venezolana" hace dos días!
 
¿La misma pinza que cuando Aznar y Anguita atacaban al unísono a Felipe González en el 93-96? Cierto que Pablo Iglesias es el líder de la izquierda no socialista que más se parece a Anguita (tono profético-mesiánico, antiliberalismo con algún resabio falangista…). Pero existen diferencias. Ahora no hay GAL ni terrorismo de Estado que valga y Sánchez no tiene el poder de la Moncloa, sino que está en la intemperie de Ferraz. Y vigilado por una presidenta andaluza que no le aprecia.

La otra diferencia es también relevante. Rajoy es un conservador biológico pero prudente, no quiere crispar y Aznar ha sido degradado a un papel en la campaña similar al de Anguita. Rajoy promete bienes terrenales: crecimiento, empleo, rebaja de dos puntos del IRPF para ricos y para pobres, unidad nacional, Fernández Díaz contra el terrorismo… ¡Pero nada de Aznar; que la izquierda de siempre no se movilice contra el Gobierno! En todo caso, ¡que la izquierda de Podemos la emprenda con Pedro Sánchez y la socialdemocracia!

¿Le está saliendo bien la apuesta o habrá cambio al centroizquierda pese a los errores y la cobardía de los últimos cuatro años de Zapatero? Mañana en el cara a cara que marcará la última semana de campaña veremos si Sánchez sigue en el 'ring'.
 
Fuente: El Periódico
Autor: Joan Tàpia
 
(Joan Tàpia es un conocido periodista catalán. Fue director de La Vanguardia desde 1987 hasta 2000. Actualmente, es miembro de la Real Academia de Ciencias Económicas y Financieras y colabora con diversas publicaciones progresistas).
 
 
 
 

PENSAMIENTO






“Para la derecha populista, el progreso consiste
en aprovecharse de los logros de la denostada izquierda”.
 
M.M.

 

miércoles, 9 de diciembre de 2015

Atalaya: Rajoy sabe dónde esconderse



En el debate de los cuatro candidatos a la presidencia del Gobierno, celebrado con gran lujo coreográfico en La Sexta y en Antena 3, hubo un gran ausente, el Presidente en funciones Rajoy, que ordenó a su vice y mujer para  las causas perdidas, Soraya Sáenz de Santa María, que se las sabe todas. Más que el propio Rajoy, que sólo dice lo que le escribe su ejército de asesores, aunque ahora que la campaña electoral se ha convertido en un baño en multitudes, en besuqueos, en achuchones a los niños y niñas (tal vez futuros "peperos") y en apretones de manos anónimas, se  echaba de menos la presencia de Rajoy en  el “cuarteto definitivo”.
 
Ni los tres candidatos del PSOE, de Ciudadanos  y Podemos pudieron eclipsar ni visual ni dialécticamente, a la a su modo atractiva Soraya, sin la cual Rajoy no podría volver a ser Presidente del Gobierno e incluso corre el rumor , que Rajoy ha desmentido, que la inclusión de Soraya  en  el cuarteto  se debería a la intención del todavía presidente de prepararla ante la opinión  pública como su sucesora. No dudo que la graciosa Soraya, que ha mostrado a millones de españoles en “El hormiguero” de  La Sexta lo bien que sabe bailar los ritmos modernos, no sea capaz de dirigir el país, quizá incluso con más inteligencia y encanto que su padre político. Pero Rajoy, pese a su edad, 60 años, no estará dispuesto, así  por las buenas, a dejar su puesto (en el caso de que sea elegido de nuevo) a nadie, n i siquiera a la simpática  Soraya (¿o es esa la sorpresa de la  que habla en sus encuentros con los ciudadanos  de a pie?).
 
Bueno. En el tan cacareado debate de Atresmedia, no se dijo nada  que pusiera en pie a los invitados al plató (creí vislumbrar sonrisas irónicas en Ana Pastor) ante la mediocridad y sosería de las intervenciones de Pedro Sánchez, Pablo Iglesias y Albert Rivera (PSOE, Podemos, Ciudadanos). Pero a eso de no decir siempre la verdad, estuvo mejor ante sus tres antagonistas, Soraya,  que puso especial énfasis en señalar la recuperación  de España, la disminución del paro (22,03% según la OCDE), la salida  visible de la crisis y la importancia de España, cuarta  potencia europea. Los demás candidatos  se limitaron más o menos  a poner el mismo disco rayado de sus mítines. Lo que más preocupa  al PP y al PSOE son los llamados partidos emergentes. Podemos quiere quitar votos izquierdistas al PSOE y Ciudadanos votos conservadores-centristas al PP. Queda flotando en el aire la posibilidad de coaliciones: PSOE/Podemos o PP/Ciudadanos. Pero en estas elecciones navideñas todo es posible. Ya veremos cómo acaba este baile de los vampiros” en torno al poder”.
 

Tema de hoy: El debate




Todo el mundo habla del debate de Atresmedia. Acostumbrada a las discusiones de este tipo en otros países, para mí fue una auténtica decepción. No me gustaron ni el escenario ni el formato. Y mucho menos los manidos argumentos que utilizaron los contrincantes.
 
A mí personalmente el tan esperado evento televisivo ni me pareció original ni me aportó nada nuevo.  Es más, al cabo de poco tiempo el aburrimiento fue tal que, tanto la visita que tuvimos este puente (un ex director de Radio Exterior de España y su compañera sentimental de origen alemán) como mi marido y yo nos quedamos fritos, algo que a mí no me suele suceder. Así que no vimos una parte de la contienda dialéctica, aunque –a juzgar por las innumerables repeticiones que he podido ver en Antena 3 y en La Sexta– tampoco creo haberme perdido algo del otro mundo.
 
Ya el comienzo fue poco prometedor. La llegada de los gladiadores y su paseíllo antes de salir al ruedo (no sé si se fijaron que la vicepresidenta llevaba un poco favorecedor pintalabios color rosa fosforito, que le oscurecieron antes de presentarse al público) y la larga espera en el plató a un Pedro Sánchez “missing” (dicen las malas lenguas que estaba tan nervioso que le dio un apretón por el camino). Luego, ese horrible plató, sin atriles, pensado quizás malévolamente para acentuar todavía más la falta de naturalidad de los participantes: Soraya, envarada, encaramada en unos tacones de vértigo que debieron dejarla molida; Pedro Sánchez, con aspecto de Ken (el novio de Barbie) y con la sonrisa congelada como si fuese una figura del museo de cera; Albert Rivera, impecable de Boss, pero que no paraba de moverse como un tentetieso y, finalmente, Pablito, con uniforme de penene, patiabierto, sudando y agarrándose a su boli como si fuese una boya de salvación… 
 
El rifirrafe en sí transcurrió, por lo que pude ver, en términos duros pero bastante educados. Ataque y contraataque. Los emergentes, contra la vicepresidenta, Pedro Sánchez y el partido nuevo contrario. Soraya y Pedro, contra todos los demás. Argumentos nuevos: cero. Enervante: Pablo Iglesias y su “no se (te) ponga(s) nervioso(s), una frase repetida hasta la saciedad, incluso mirando a los moderadores y al público, tanto si venía como si no venía a cuento…
 
La moderación a cargo de Ana Pastor y Vicente Vallés tampoco estuvo muy allá. Ana Pastor, normalmente incisiva (e incluso agresiva) cuando se trata de poner en evidencia a sus entrevistados en La Sexta, esta vez optó por ir de modosita y se dejó comer la tostada por el director de informativos de Antena 3, que fue la gran sorpresa de la noche, al dejar de lado su habitual guante blanco y hacerse el amo del cotarro a la hora de interrumpir o formular sus preguntas y repreguntas a los cuatro políticos.
 
No me voy a alargar citando las frases más venenosas del cara a cara. Prefiero que las lean siguiendo ustedes mismos el enlace que les conducirá al artículo de ABC: “El debate electoral, en frases”.
 
¿Qué eché de menos en el debate? En primer lugar, la presencia de Rajoy. Su ausencia me pareció una cobardía. Y no sólo yo pienso así: las redes sociales están llenas de memes y chascarrillos, algunos de ellos con mucha gracia. Después, la ausencia de Alberto Garzón, candidato de IU-Unidad Popular, que no mereció ser ninguneado. Por mucho que las expectativas de voto que le dan las encuestas sean devastadoras, no acabo de entender por qué IU, a pesar de haber sido la tercera fuerza política en las últimas elecciones, no fuese invitada a participar en el debate. A mi entender, es de un mal estilo sin parangón excluir al representante de IU-Unidad Popular de éste y de los otros debates electorales que se han venido celebrando últimamente en  los más importantes canales de televisión.
 
Ahora, dos días después del debate, en el que Pedro Sánchez estuvo paralizado por los nervios, parece que los otros tres participantes, por diversos motivos, se han puesto de acuerdo sobre la táctica a seguir en lo que queda de campaña electoral y que no es otra que la de  “leña al mono que es de goma”. El mono, en este caso, es el PSOE en general y Pedro Sánchez en particular.
 
Si Sánchez no despabila y recupera el ritmo perdido, lo tiene crudo para evitar la caída en picado del PSOE al tercer lugar. Y entretanto, mientras los barones afilan los cuchillos, Susana Díaz, según los mentideros del PSOE, espera agazapada la ocasión para desbancar a Pedro “el guapo” en la Secretaría General del PSOE. Al parecer, Susanita ve su oportunidad tan cercana que, como cuentan algunos compañeros con muy mala uva , tendría ya el billete del AVE Sevilla-Madrid en el bolsillo.
 
Margarita Rey